lunes, junio 18, 2007

LA IRA

PRIMO CAIN, EL IRASCIBLE

Pecado divertido como ninguno, la ira. Permite patear al perro, porque te echaron del trabajo, golpear a tu novia, porque te quiere dejar, chocar con tu camión a un automovilista que te insultó o porque Alemania perdió la guerra del ’14, hacerle la guerra a toda Europa, entre otras cosas.
En mi familia somos muy de tener ira. La mayoría, la disimulamos, porque somos de ser cobardes. Pero primo Caín, ese sí que es bravo. El padre, tío Jesús, le puso ese nombre, para ver si el chico le salía malo, para vengarse de que a él lo habían castrado hasta el infinito. Y la pegó. Cuando nació, primo Caín ya tenía dientes, y la madre no le pudo dar el pecho, porque la mordía con ferocidad. Eso le trajo un complejo de abandono, lo cual agravó su irascibilidad, por lo que no pudo jamás dormir solo en su cuna, y tenía que dormir entre los padres. Si no lo llevaba, lloraba toda la noche. Y lo terminaban llevando, para poder dormir. Y ahí se la tomaba con los padres, y les pegaba por haber tardado en traerlo. Esto fue el principio de su
Final. Además de no poder tener relaciones con su esposa, tío Jesús, decidió irse de la casa, cuando Caincito le mordió su... bueno, una parte de él, muy importante... no quiero entrar en detalles escabrosos...
La madre, tía política Zulema, tuvo por primera vez en su vida salir a trabajar. Entró de vendedora en una tienda de ropa femenina, y como no tenía con quien llevarlo, la dejaron llover a Caín con ella. Como era rubio, de ojos celestes y muy bonito, todas las señoras lo querían acariciar. Y él odiaba que lo toquen. Siete perdieron un dedo, en la primera semana. Cuando la dueña volvió de vacaciones, y se enteró de lo que pasó, la echó. Zulema decidió trabajar de cuidadora de leones en un zoológico privado. Nunca quedó claro si ella lo hizo adrede, pero la cuestión es que él entró en la jaula de la leona, que acababa de tener dos cachorros y no quiso salir más. El instinto maternal de la fiera, hizo que lo aceptara como un cachorro más. A la semana, ambos cachorros, habían perdido la cola, las orejas, y estaban lastimados por todas partes. Cuñado el dueño del zoo se dio cuenta, le exigió a tía Zulema, que deje al niño, en otra jaula, para exhibirlo como fiera. Todos los días una muchedumbre pagaba para verlo comerse gallinas vivas y con plumas.
Bueno, esta fue parte de su niñez. Por supuesto que no lo aguantaron ni una semana en ningún colegio. Llegó a romper pizarrones en las cabezas de los maestros que lo reprendían. Aprendió a leer con ayuda de la mamá, que madre al fin, le perdonaba siempre los golpes y mordeduras que recibía. Su estado era tan lastimoso, en sentido literal, que jamás pudo luego formar pareja. Parecía una momia, por todas las vendas que tenía, para curar las heridas que le producía primo, ante el mínimo ataque de ira. Por supuesto que admiraba a Hitler, desde que leyó su biografía. No le gustaban las películas de acción.
-Todas terminan mal, con la muerte de los malos –me dijo un día que vino a casa, 5 minutos antes de que huyeran despavoridos mi mujer, mis hijas, el loro, y las ratas que había en el sótano. Fue a su pesar, una acción positiva, lo de la huida de las ratas. Mi mujer y mis hijas no volvieron, se fueron a vivir con mi suegra. Bah’, no sé que fue peor... para ellas, claro. Porque mi suegra, Leonor, era más violenta y colérica que Caín.
Ambas cosas nunca se las agradecí en forma debida. Aunque a mi hija menor, a veces la añoro, no era tan parecida a la madre y a mi suegra. Y era tan bonita.
Y no se crean que a caen de grande le fue mal. Entró en un partido político, muy mafioso, y allí pronto hizo carrera. Mejor dicho, no lo ascendían, sino que el bajaba a los que se le oponían... sobre todo les bajaba los dientes a golpes. Bueno, corrieron rumores de que le dio trabajo a más de un enterrador... Nunca se pudo probar. Rectifico, nadie se animó a probarlo, y menos llevarlo a la justicia. Mi actual mujer, dice que “entre bueyes no hay cornadas”. Puede ser, nunca afirmo nada, que no sea probado. Pronto corrió su fama de irascible, y lo llamaron de una fuerza especial de las FF.AA. de USA. Se que estuvo en Bagdad, y sospecho que lo trasladaron a Irán. Tiemblo por los iraníes...
Pero en el fondo le tengo una envida terrible... Uno es tan cobarde, apocado, cuando le tocan el c... Y sería tan bueno no medir nada y reventar a quienes nos hacen c... Eso sí, de mujeres, nunca se le conoció ninguna. Al menos alguna que haya quedado viva, viviendo con él... Mi psicólogo dice que eso debe ser una tendencia gay. No lo sé... si eso fuera así, habría tantos gay... mirando a Bush nomás... claro, Jeorge W. le pega a los de afuera. Pero me gustaría saber como es su vida íntima, con su mujer, por algo las hijas le salieron un tiro al aire. Mejor no hablo más, a ver si primo Caín se entera.

domingo, junio 10, 2007

SAN LORENZO DE ALMAGRO



SALIMOS CAMPEONES POR DÉCIMA VEZ
Esto es para que vean que no soy anticlerical como todos creen.
Yo adoro a SAN LORENZO DE ALMAGRO, el campeón de este año de la República Argentina, donde está el mejor fútbol del y los mejores jugadores .Es el dueño de mi corazón, dsespués de otro montón de amores, como mi compañera de tranvía, Betty, mi hijo Alejandro, mis nietas Bianca y Juliana, y un puñado de amigos, como Marcelo Niño, Roberto Docampo y Germán -no pongo el apellido, porque es un hombre importante y quedaría feo que la gente se entere de que es amigo de un atorrante de barrio como yo. Hay otros más, pero no quiero hacer una lista.
Pequeño gran gusto, del niño y el adolescente que sigo siendo, que fué tantas veces a la cancha, y sufrió más que gozó.
Pero como me dijo alguna vez alguien, tengo derecho a tener pasiones.
Nada, más... solo placér efímero, en algo más efímero, como es la vida...
un beso y un abrazo para todos, en Cilencio...
¡SOMOS CAMPEONES, CARAJO!

viernes, junio 08, 2007

LOS PECADOS CAPITALES., HOY LA GULA

PRIMA LEOCADIA, LA GOLOSA

Esta es una foto de prima Leocadia, el día que se rompió su noviazgo. El petiso Deolindo Correa, no pudo con ella. Y eso que hacía pesas... Lo enterraron en el Cementerio, en un cajón especial, plano y ancho, porque así lo dejo Locadia.
Prima Leocadia se puede comer todo, hasta las palabras se come. No te dice: –Hola, ¿como te va?
Ella dice:-¿Hola, gummnfgg va? –porque siempre tiene la boca llena de comida, y habla masticando. Lo que se ha comido, no tiene nombre, mejor dicho sí...Todo lo que es comestible para el hombre, y para las bestias. Llegó a robarle la comida a Fifí, el gato de tía Ambrosia, la madre. El gato se empezó a quedar tan flaco, que parecía una radiografía. Eso terminó, cuando el gato, pasó por liebre, y Leocadia se lo comió en guiso. Y todavía se sintió frustrada, porque tenía poca carne. A tía le dijo que se fue detrás de una gata de angora a vivir su vida. Y como tía es loca por los romances, sobre todo l9os de las telenovelas, hasta se puso contenta, aunque lloró un poquito.
Leocadia es loca por los helados. Come no solo a dos carrillos, sino a dos manos. Los cucuruchos no los lame, ni los come con cucharita. Se pone la punta en la boca, y empujaba, hasta que desaparece, y para no perder tiempo, de inmediato pone el otro. Debo reconocer que es de boca grande. Hace juego con su peso, que era 221 kilos, cuando comenzaba a hacer régimen. No quería llegar a los 222, porque decía que si no se sentiría una caja de fósforos, que en Argentina se llama “3 patitos” y que trae 222 fósforos. Entonces baja unos 10 kilos, y luego, sintiéndose liviana, se da el gusto de comer a lo bruta.
Había leído que en una fiesta, Enrique VIII, el Rey de Inglaterra, se había hecho servir un toro, relleno de un cordero, este relleno de un pavo, el pavo de un faisán y el faisán de mirlos. Se fue a Londres, para tratar de encontrar quien hacía esos platos, para devorarlo.
Un día, dicen en la familia, que tía Ambrosia, cansada de soportar los eructos por ambos extremos de su hija, se fue de la casa, y nunca se supo más de ella. Esto bastó para que se sospechara de un acto de canibalismo de Leocadia. La denunciaron, pero no se pudo probar, porque no habiendo evidencias, la investigación quedó en la nada. Yo no afirmo nada, pero Prima Leocadia, siempre le decía que la amaba, y su frase predilecta para manifestarlo era:-Como te quieruffg, má... Te comería gfgwgf toda.
Era el terror de los restaurantes con tenedor libre. Se ganó en poco tiempo, el que le prohibieran la entrada en todos. Fundió por lo menos 4, que yo sepa. Nadie la invita a los casamientos, desde que a los 17 años, fue al de tío Octavio, llegó primero que nadie, y cuando llegaron enseguida los demás invitados, hasta la torta de casamiento había engullido, incluidos los muñequitos y los anillos con cintitas para las solteras. Y como se sintió mal, se fue enseguida, y nadie le creyó lo que había pasado, por culpa de que tío Octavio era muy avaro. Dijeron que no puso comida.
Donde también tuvo problemas fue en los Supermercados... se metía frutas en la boca, como uvas, pero no de a una como hago yo, ella tragaba racimos. Con las bananas, hacía lo mismo que con los helados, se los ponía en la boca y empujaba. Lo hacía tan rápido, que en Carrefour nunca le podían probar nada, porque no la encontraban masticando. Hasta que le pusieron un detective que la siguiera cuando llegaba. Y ahí cometió un error, con una tajada de sandía... se atragantó con la cáscara. Vomitó todo sobre el pobre detective, que del asco se desmayó. Pudo irse sin que nadie se diera cuenta de nada. Y esa fue su última vez, en Carrefour, porque en Wal Mark hizo historia. El gerente, tipo con gran visión comercial, hizo que la filmaran con cámaras ocultas, cuando comía a escondidas y después ganó un buen dinero vendiéndolo a la gente de Ripley, el de “aunque usted no lo crea”. Y luego además la contrató para que comiera lo que quisiera, para publicitar lo buenos que son sus productos. El video lo pasaban en todas las sucursales de USA, hasta que el ministro de salud lo prohibió, porque dijo que era “apología a la obesidad”. Eso a mi prima le dejó bastante dinero, con lo que lo invirtió en comprar un supermercado chino. Ahí tuvo problemas, el día que como era su mercadería, dijo._Me pedogffger todo lo fgrgtar yo quiera –y se quedó dos días adentro comiendo. Después no pudo salir por la puerta había engordado 56 kilos. El padre, tío Juan, con gran rapidez mental, se dio cuenta de que si esperaba que adelgazara para poder salir, fundía el negocio, hizo romper la puerta para que pasara, y la sacó enseguida. Lo del supermercado chino, le dejó, pese a todo, porque el padre no la dejaba entrar, bastante bien, hasta que se puso en contacto con médico dietista. Este le calentó la cabeza para poner una clínica de adelgazamiento. Entonces ella apareció con sus 222 kilos en un programa de TV, donde hizo ver que adelgazaba gracias al sistema del médico. Pero en realidad, tienen varias dobles de ella, que tienen distinto peso, cada una más delgada que la otra. Y las van mostrando mes a mes, hasta que muestran a la más delgadita. Ya eso le dejó buen dinero. Yo hace tiempo que no la veo, pero me dijo que se pensaba tomar un año sabático.-Me voy a gftrjsfgs a dedicar a grefsdej comer, gresgt, comidas exóticas –me dijo mientras devoraba una pata de jabalí. -Y después voy a hacer un gholfesg programa de cocina gsresgfd, exótica. Creo que la va a ir bien... es muy inteligente, y en última instancia, tiene una oferta del gobierno de USA, para demostrar lo que produce la comida chatarra. Contar eso me dio hambre, me voy a comer papas fritas, sandías, dulce de leche con cucharón y un buen cordero a las brasas. La glotonería en nuestra familia es genética, gfstedrs...
No hagan esto en casa, niños.

lunes, junio 04, 2007

LOS 7 PECADOS CAPITALES

Los 7 pecados capitales.

HOY LA AVARICIA

-Nunca entendí porque hay pecados capitales y no provinciales –me dijo mi primo Horacio. Y en realidad, yo tampoco lo sé.
-Será porque en las grandes ciudades capitales, hay más pecado, por eso de que Dios está en todas partes, pero en las grandes ciudades capitales, la gente vive tan amontonada, y no tiene lugar Dios para estar y cuidar de sus ovejas -continuó Horacio, que es un tipo muy crédulo, cree cualquier cosa que le digan. Como que cree en forma ciega en los avisos de la TV. Por suerte es un hombre de fortuna, y se puede dar el lujo de comprar 57 clases de desodorantes, de esos que te prometen las mujeres más hermosas del planeta si los usas. pero no lo hace, por avaro, y sufre por no poderlos probar. Probó todos los vinos en las fiestas de los demás, pero jamás compró ninguno. Por eso sólo se emborracha en las reuniones, y eso logró que ya no lo inviten a ningún lado. Y cambia todos los años de auto, cuando le dicen que el modelo nuevo es mejor. Pero no va en auto, para ahorrar en nafta. Presentó con un abogado, un recurso de amparo, para poder votar a todos los candidatos en todas las elecciones, porque creyó en las promesas de todos ellos. Por eso el pecado que más ejercita, es la avaricia... es tan avaro, que es asmático, para no tener que respirar mucho. Es introvertido, habla poco, para no tener que gastar en saliva. Le encanta la caza menor, y aprendió a tirar muy bien, para matar a dos pájaros de un tiro. Lava los preservativos, para usarlos de nuevo. Usó uno como un año. Claro, a veces le falla, tuvo 17 hijos, con Leontina, la mujer. Pero al contrario, ella es muy generosa, muy abierta. De los 17 hijo, uno es mulato, otro pelirrojo y hay uno con rasgos orientales... Ella les hace favores a todos. Primo Horacio, sabe que ella es infiel, pero para no gastar en divorcio, se hace el que no se dio cuanta de nada. Eso de que no come huevo, para no tirar la cáscara, no lo inventó él, pero la muele tan bien, que después la usa como harina para alimentar a los hijos. Tiene el vicio del tabaco, pero no fuma. Lleva el cigarrillo apagado, para ahorrar. Camina en puntas de pies, para gastar menos la suela de los zapatos. Se baña sólo los días de lluvia, y al aire libre en el fondo de la casa, para aprovechar el agua de lluvia. En invierno, con la excusa de que tiene asma, no se baña, para no engriparse. Jamás se sienta, para no gastar los fundillos del pantalón. Es más en la casa no tiene sillas.
-Así de pie, fortalecemos las piernas –afirma tranquilo. Se para frente a la TV con los ojos cerrados, porque es miope, y no quiere gastar los anteojos.
Los hijos lo odian, pero a él no le preocupa.
-No quiero sentirme mal por eso, porque me llegaría a doler la cabeza, y tendría que gastar en aspirinas -me explicó un día, en que me invitó a comer.
-Vamos a medias -me dijo. El puso los platos y los cubiertos, y yo tuve que llevar la comida.
Duerme en posición fetal, enrollado, para no gastar tanto el colchón. Para ahorrar en leche para los hijos, se compró una vaca lechera campeona, y para no gastar en pasto, le enseñó a tomar su propia leche. Cuando había conseguido que la vaca aprendiera a tomar leche, tuvo mala suerte, se le murió. Fue la única vez que hizo un asado, y con cuero. Ni eso dejó. Lo que no sabe, es que la mujer lo engaña con el contador de su fábrica de coladores de queso. Y que gasta todo lo que él no gasta. Todo lo que se compra, le dice que lo encontró en la calle. Y él se lo cree, para que no se le gaste en cerebro, en elucubraciones.
Cree que al vender los coladores llenos de agujeros, se ahorra mucha materia prima. Cuando le dijeron de fabricar cucharones no quiso, y sí, agregó el fabricar espumaderas.
-Son tan grandes los agujeros, que casi no gasto nada en materia prima – dice feliz de ahorrar.
Lo terrible es cuando se resfría, y es alérgico. Inventó un sistema para lavar los pañuelos de papel usados. Lo patentó, pero hasta hora no se lo quisieron comprar
En verano, va de vacaciones con toda la familia, a una playa nudista, lo que le permite ahorrar en mallas y ropa. Su único problema allí, es el papelón que pasa con su manicito. Porque parece que hasta la naturaleza lo ayudó a ahorrar en eso. Está muy contento porque es constreñido. Evita además comer fibras vegetales, porque ayudan a evacuar el vientre.
-No sabes cuanto me ahorro en papel higiénico –me dijo muchas veces, feliz por esa “cualidad”.
No, no, eso no intentó reciclarlo... ya estaría muy loco.
Lo peor, es que como no lee las cuentas que le presenta el contador, como dije, para no gastar los lentes, no sabe que lo están fundiendo... ya se va a enterar, cuando la mujer se escape con el contador y todo su dinero, dejándole unas deudas terribles...Y supongo lo va a soportar en silencio, para no gastar en abogados...
Mi familia es muy peculiar... hay tipos más extraños aún... como primo Pedro, el goloso.
Ya voy a contar algo.
Amén y amen.
Juiceman II