EN MI FAMILIA HAY GENTE DE PRO... TODO LO HACEN EN PRO DE ELLOS.
Mi primo Horacio era militar. Oficial de alto rango. El orgullo de la familia… de la familia militar claro…de la nuestra no. Peleó para defender los sagrados intereses de una de las tantas dictaduras militares, que hicieron de América Latina, un paraíso. O sea como era el Edén, luego de que fueron expulsados Adán y Eva… solo quedó la víbora, y algunos árboles, y los animalitos mal llamados inferiores, pero que según mi abuelita Filomena, son superiores, porque entre ellos no hay sacerdotes, militares, ni políticos corruptos, ni capitalismo salvaje, ni burocracia, ni idiotas útiles que los apoyan. Tuvo una mente muy activa… objeto que no fuera suyo, activaba sus neuronas para apropiárselo, sea como sea…Y siempre era como sea… Como sería eso, que hasta lo echaron de la fuerza militar donde se servía, por ladrón. Había olvidado eso de que “entre bomberos, no hay que pisarse la manguera”, y él “expropió” bienes de sus compañeros.
Pero igual llegó muy lejos… y se hizo millonario… cuando se casó con mi prima Leontina, con la fortuna de ella. Eso sí, era muy devoto… muy creyente…adoraba al dinero. Veía un billete de 100 dólares, y se persignaba. Ni le digo lo que hacía cuando pasaba frente a un banco. Si estaba abierto, entraba para ver que podía robar, sin que nadie se diera cuenta. Y de cualquier modo, allí siempre se rezaba algunos Padrenuestros, por eso de “perdona nuestras deudas, como nosotros NO perdonamos a nuestros deudores”. Sí, ya sé que es “como nosotros perdonamos a nuestros deudores”. Pero primo Horacio no perdonaba sus deudores. Se hizo prestamista, pera tener un hobby. Cobraba el cien por ciento de interés mensual, y si no le pagaban, les mandaba a los “muchachos”, para que se cobren como sea. Y era “como sea”, también en esto…Pero tenía buen corazón… Siempre que veía a un pobre, pidiendo limosna, jamás le robó nada. Y una vez le dio una moneda a una viejita ciega con muletas, que pedía en la puerta de su templo favorito, el Banco de la Nación. Es más, se la puso en el tachito, y cuando se dio cuenta de lo que había hecho, se la sacó y salió corriendo, porque la viejita creyó que le había robado las demás monedas. Ese día decidió ir a un psicólogo, porque creyó que se había vuelto loco.
-¿Tendré doble personalidad, licenciado… hoy casi doy una limosna?
–le preguntó, mientras se metía la lapicera Parker de oro del profesional en un bolsillo del uniforme. Tuvo suerte de que el psicólogo, muy astuto, y para prevenir represalias, le dijo que no era un ladrón. Lo llegó a convencer de que sólo era un cleptómano, pero mayorista, y que eso no era pecado, tan solo una manía típica de quienes no habían tenido amor paterno. Cosa que era verdad, porque era huérfano. Las malas lenguas de mi familia, dicen que el padre se suicidó cuando le leyeron una carta natal del hijo, donde predecían todo lo que iba a ser. Pero no lo creo mucho… todos en mi familia están resentidos con él, de envidia, porque les robó más bienes, que lo que ellos le pudieron robar a él. Tengo una familia de resentidos, no saben perder. Y eso que están acostumbrados, porque todos somos fanáticos de la libertad política y económica del país. Y siendo todos sudamericanos, ya deberíamos saber que el destino del hombre es ser expoliado.
En sus últimos tiempos, su misticismo se expandió a nuevos planos. Se dio cuenta de que las iglesias católicas, hacían vibrar a su alma creyente…. Creyente en que los objetos de oro, se pueden vender muy bien. Se hizo proveedor de las mejores santerías del continente, vendiendo cálices y candelabros de oro, obtenidos mediante su devoción por la cleptomanía. Su uniforme militar, imponía respeto, y no es que no dudaran de él, pero lo respetaban porque temían sus represalias, y su ya bien ganada fama…no me pregunte de qué… pero era una fama impresionante…daba miedo, más bien terror…
Hace tiempo que no tengo noticias de él. Mi prima Leontina, la esposa, dice que está de gira, pero 15 años, me parece un tiempo demasiado largo para una gira… Hay rumores de se estableció en Arizona… no sé bien el nombre de la cárcel… lo que no sé, tampoco, es si está como director o como pensionado…De cualquier modo, es un lugar tranquilo, de recogimiento espiritual. Porque a primo Horacio, le gustaba lo del recogimiento, me acuerdo cuando entró en un convento dominico… Y allí se recogió todo lo que pudo, se lo llevó en un camión con acoplado… hasta las camas recogió…Ojalá siga de gira… Así uno puede dormir más tranquilo aquí.
Amén y amen.
6 Comments:
Merecés el Nobel a la ironía y el humor.
¡GENIO!
(Que me perdonen los que dicen saber de protocolo entre internautas y prohiben escribir con mayúsculas...No es lo mismo con letras pequeñitas)
GENIOOOOOOOOOOO!!!!!!!!!
diana, te amo, en Cilencio.
Amén!
che
y que yo pensaba que esas cosas pasaban solamente en mi familia !!
EL GUANACO
Mariela despeinada, Alea jacta est. y Amén
y te envio un beso en Cilencio.
mengano y sultano, o el guanaco, tu esquizofrenia se suma a la mia, y no sé a quien demonios le hablo, pero gracias por dejar la huella del guanaco en mi blog.
vun todo mi cariño para el guanaco...¿es macho o hembra? porque si es hembra le envio un beso y si es macho un abrazo.
Publicar un comentario
<< Home