viernes, julio 16, 2010

EL AMOR, ESO QUE NADIE ENTIENDE...



LA FOTO DE ARRIBA ES DE JULIANA, UNA DE MIS HADAS PROTECTORAS, PERO SIEMPRE ESTÁ DE VACACIONES... ASÍ ME VA... EL ORIGINAL LO TIENE MI NIETITA JULIANA DE 6 AÑITOS...

EL AMOR

Nadie sabe en verdad que es el amor. Si no me equivoco, es algo muy complejo y subjetivo… Pero todos creen saberlo. Confunden a una suma de sentimientos, desde culturales, hasta genéticos, y lo mezclan de modo muy imbricado, con algo tan simple como el puro y hermoso instinto sexual, vituperado hasta el hartazgo, -¡vade retro Satán! -que nos impulsa a copular, para reproducirnos, como todos nuestros hermanos animales.
La ciencia moderna, que está llegando a ser casi una sucursal de la sabiduría de lo que muchos denominan Dios o Dioses, desencripta día a día todos nuestros sentimientos, mediante el estudio de nuestro organismo, incluido el cerebro, demostrando que somos obedientes, esclavos ciegos y pasivos, de nuestras hormonas, las benditas testosteronas y las progesteronas. Desde hace milenios, los griegos ya hablaban de amor y enamoramiento y pasiones desenfrenadas, como la desencadenada por París y Elena de Troya, que según la leyenda, tantas muertes produjo. Y todo por una mujercita, con unos atributos femeniles, un poco más al gusto de la moda de esa época, que las demás miles de mujeres que habría en Europa. Sobre este tema del amor pasional, sufrieron, escribieron y cantaron millones de personas. Y se mataron y murieron millones de hombres –ver las noticias policiales -como en Troya, de modo inútil. Y es así, porque ninguna mujer o un hombre, es demasiado superior o inferior al resto de sus demás congéneres, salvo muy contadas excepciones… -ver Bush, Hitler, Gengis Kan, mi tío Cirilo, Saddam, Tony Blear, Nerón, Franco, Pinochet, Margaret Thatchert, mi consuegra, etc. -
Nunca nada justifica matar o morir por el amor o desamor erótico-romántico de una persona. Son por las leyes paradójicas y subjetivas de la creación, y nos equilibran, las ventajas que se le puedan atribuir a alguno, tan grandes como sus contras. Claro que para poder pensar así, debemos desprendernos de infinitos prejuicios, que durante milenios, nos han aprisionado los pensamientos lógicos… y ni nos imaginamos, lo subjetivo que es lo que estamos diciendo, cuando decimos que amamos a un ser del sexo que nos gusta –son variados-.
Resumo, el amor es inefable, pero mágico, maravilloso, delicioso, deslumbrante, por desgracia, se parece mucho a estar borracho, o drogado. Pero enamorarnos, que consiste en ver a alguien como único en el Universo conocido, es lo más terrible y espantoso que nos puede suceder... y por desgracia, ¿y por que no?, por suerte, nos sucede. Pobre de quien no se enamoró como un padrillo en celo, o yegua, según el sexo… Eso, siempre y cuando haya sido correspondido… Sino, mejor ser acólito de San Onán Bendito, el santo que la da una mano a los solitarios. Digo, no sé, los viejos no deberíamos hablar de estas cosas… No queda bien… debemos ser serios, mesurados y actuar y pensar porque la lívido se muere en la juventud. Al menos eso creen los jóvenes y las personas serias de verdad, como el Papa… A propósito, salvo una película de los ’50, creo que era “Marty”, y eran él carnicero feúcho, gordito y petisón, y ella una mujer sin los encantos de belleza de Hollywood, mal llamada bien fea, similar a él, todas las películas de grandes amores pasionales, son entre dos considerados hermosos seres humanos, nunca entre dos gordos, maduros, y mal llamados feos, petisones y pobres… ahora pregunto yo… quienes no entran en la categoría de bellezas cinematográficas, ¿no pueden amar a nadie, y incluso enamorarse de modo mutuo, como camellos en celo? Quisiera ver una porno, entre personas así… y la disfrutaría mil veces más, que con esas señoritas con pechos tan inflados de siliconas, que parecen cucuruchos de helado gigantes, que no se doblan ni aplanan, en ninguna posición, ni siquiera boca arriba. Sé que no la voy a ver… El mercado es implacable, las telenovelas son amores entre gente perfecta, hasta en los menores detalles, que proporciona el, maquillaje, las cirugías, las búsqueda de los mejores ángulos, las luces y mil trucos más, que todos conocen. Bueno no divago más, que de esto no entiendo un coño, porque soy viejo. Quien sepa que carajo es el amor, que me tire el primer beso y abrazo, bien cinematográfico, a ver si así lo entiendo.
Y VA MI MMEJOR BESO EN CILENCIO, DEL ESTILO QUE DESEEN...

3 Comments:

Blogger Marple said...

Para mí que soy sexagenaria es vivir con la misma persona durante 40 años y sentir que si no está. la vida no es completa , y que lo de "hasta la muerte nos separe" muy propio de los teleatros y las novelitas de amor, es cierto.
Lo que digan los sicólogos sobre este tipo de relación alegando costumbre, o dependencia o hasta neurosis, me tiene muy sin cuidado.


Un placer leerte.

8:57 a. m.  
Blogger Marple said...

Me emocioné tanto con el tema, que publiqué sin corregir. Mil perdones.

9:01 a. m.  
Blogger CILENCIO NO SE CALLA said...

Marple, no me gusta meterme con pendejas, y vos losos para mi, claro, no ahora, pero sí cuando yo tenía 20 años... siento lo mismo yo, con mi compañera de tranvía, ya van varios siglos juntos, y me aterroriza la idea de que alguno de los dos no esté... gracias por leerme, t gracias por los elogios... siempre me los creo... un beso en Ciencio...

5:43 p. m.  

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